Veintidós preceptos son el legado de los enviados de los tres Tiempos, preceptos que os clarifican y os explican la Ley de Dios para que os conduzcáis en la vida humana de acuerdo con ellos.
Estos 22 preceptos forman en su unidad la Ley y están formados por la explicación de los Mandamientos que Dios entregara por medio de Moisés, el enviado del Primer Tiempo; por las enseñanzas de Jesús, el enviado del Segundo Tiempo y por los preceptos de Elías, el enviado del Tercer Tiempo, que le son revelados al pueblo de Israel por conducto de Roque Rojas, como preludio a la apertura del Sexto Sello y del tercero de los tiempos el 1º de Septiembre de 1866 en esta nación mexicana. [Consejo de Elías de Tisbe]
Los Preceptos de Moisés de Leví, Jesús y Elías, el hijo del hombre
Año del Señor 1º de septiembre de 1866
1º Amarás a Dios antes que a todo lo creado.
2º No hablarás mal de tus hermanos aunque tuvieras motivo para ello; a Dios toca defender tu causa si ésta fuera justa.
3º No amarás religión alguna que no reconozca en María la esencia maternal de Dios que siempre ha existido, y tendrás caridad con tus hermanos, sean los que fueren.
4º Amarás a tus padres después que a Dios, y a tus hijos lo mismo; para los primeros veneración y respeto, y para los segundos, caridad y buen ejemplo en todo.
5º No jurarás ni tomarás a Dios como testigo de mentira.
6º No trabajarás en el séptimo día, por pertenecer ese día a la oración y al descanso.
7º No tomarás la mujer de tu hermano como si fuera tu esposa, ni harás mal a las que no sean de tus hermanos.
8º No te dedicarás a la usura causando graves daños con ella.
9º No tomarás bebida que te embriague, ni usarás elemento de la Creación alguno que nuble tus sentidos o te someta a baja pasión.
10º No tendrás ocupación ruinosa que quite la moralidad y proteja los vicios.
11º No protegerás la guerra civil, dividiendo a tus hermanos, ni tomarás parte en guerras extranjeras; sólo se te permitirá participar en actividades de guerra, si tu país fuese el invadido y el gobierno de ese país, sea cual fuera, para su defensa así lo ordenara; y aun así, te comportarás con la mayor caridad y no tendrás enemigos, porque todos sois hijos del mismo Padre.
12º No harás infanticidio en los niños que están por nacer, porque si lo haces, el Espíritu Santo te lo reclamará.
13º No tratarás mal ni con rigor a los pobres, sean los que fueren.
14º Nada de lo creado maldecirás.
15º No tratarás con desprecio a los que sufren enfermedades que tú llamas asquerosas.
16º No hablarás mal de los seres en público causando su deshonra.
17º No abandonarás a tus hijos en manos extrañas, y sólo lo harás por tu extrema necesidad, siempre y cuando te sea conocida la conducta apropiada de la persona bienhechora.
18º No forzarás a los niños a que hagan trabajos que les enseñen vicios.
19º No les enseñarás a tus hermanos historias, cuentos o consejas que no sean ciertas; y no hablarás, propagándolo, del mal que dicen tus hermanos hacer.
20º No retendrás lo ajeno en tu poder.
21º Visitarás al enfermo, consolándole.
22º No tomarás armas en contra de tus hermanos, ni les darás muerte, sea con arma o sea civil.
Dice nuestro Pastor Elías: Cumplid hijos míos, estos 22 Preceptos, y veréis a mi Padre en todo su Esplendor. Caridad y más Caridad en todo, y veréis la Gloria de mi Padre.